Al momento de desarrollar un producto alimenticio queremos que se distinga del resto y ofrecer una propuesta de valor real a nuestros futuros clientes. Es muy importante tener en cuenta esta estrategia ya que puede generar un gran impacto en el éxito del producto y proporciona al emprendedor o empresario una ventaja competitiva.
Actualmente los consumidores tienen acceso a la información de los productos que desean comprar, eso les permite elegir entre las opciones que el mercado ofrece. Continúa leyendo, en este blog te platicamos qué estrategias puedes aplicar para que tu producto marque la diferencia entre la competencia.
Lo primero será realizar un análisis del mercado para identificar productos emergentes, sus características principales en sabor y empaquetado. El secreto para crear una ventaja competitiva es comprender a nuestros próximos consumidores y tener claras cómo son sus decisiones de compra.
La característica del producto será clave a la hora de diferenciarlo del resto. Para hacerlo, se realiza un análisis del producto que deseamos desarrollar, empaque, proceso y fórmula para perfeccionarlo y escalar en el mercado.
No olvidemos que, a la hora de comercializar un producto alimenticio se debe garantizar el cumplimiento de la ley.
Hay que considerar que cumpla con los requisitos de etiquetado nutricional, asegurar que el empaque que se desea utilizar es limpio, atractivo y en el futuro ayudará a comunicar la imagen del producto.
Por último, la calidad abarca desde las fases iniciales del desarrollo del producto hasta más allá de su consumo. Para ofrecer un producto con el nível de calidad necesario para diferenciarse, se debe tener en cuenta la elección de materia prima y su producción haciendo un uso responsable de recursos y el empaquetado.
En FIQA te ayudamos en el desarrollo desde el inicio, a través de nuestros análisis enfocados en las necesidades de tu producto para partir de ahí y marcar la diferencia en el mercado.
