Como seguro ya sabes, gracias a la implementación de la Norma Oficial Mexicana NOM-051, las empresas de alimentos procesados y bebidas no alcohólicas comenzaron a incluir advertencias en sus empaques sobre el exceso de calorías, azúcares, grasas, etcétera, que contienen sus productos.
Cabe destacar que este no es el único cambio que van a tener las etiquetas; pero no te preocupes, ¡aquí encontrarás todo lo que necesitas saber al respecto!
Si bien la nueva norma es una gran herramienta para que los consumidores elijan con mayor facilidad los productos que más les convengan, no deja de ser importante que conozcas y entiendas los datos que vienen en las etiquetas de alimentos, las cuales incluyen, entre otros datos, la tabla de información nutricional, la lista de ingredientes y las fechas de caducidad.
Etiqueta de alimentos, ¿qué es?
Es cualquier espacio de exhibición, ya sea como etiqueta, faja o collarín, que acompaña a los productos alimenticios y muestra sus datos. Este es uno de los grandes puentes entre fabricantes y consumidores; por ello la información que revele debe ser correcta.
¿Cómo leer la etiqueta de alimentos?
1. Identifica los sellos de advertencia.
Los sellos de advertencia se colocan en el producto alimenticio si se considera que este tiene algún exceso de calorías, sodio, grasas trans, azúcares y grasas saturadas. ¡No los ignores!
2. Reconoce las leyendas precautorias
Estas, como su nombre lo indica, advierten al consumidor sobre los posibles daños a la salud que puede ocasionar la presencia de un ingrediente específico, en este caso la cafeína y los edulcorantes (no recomendados para niños):
- La cafeína debe evitarse porque altera el sistema nervioso; lo que puede desencadenar insomnio, irritabilidad e, incluso, taquicardia,
- El edulcorante, por su parte, no se recomienda porque puede generar adicción a sabores muy dulces.
3. Identifica y reconoce la tabla nutrimental
Esta, luego de la reforma, ya no va a ser la misma, pues ahora será evaluada por un contenido de 100 g. Lo que debes hacer es identificar cuántos gramos del producto vas a consumir para que calcules el valor nutrimental apropiado para ti.
4. Fecha de caducidad
Se trata del tiempo de vida que te producto tendrá siempre y cuando se respeten las condiciones en las que este debe estar. Recuerda leer con atención las instrucciones de consumo, pues al momento de abrir un producto su tiempo de vida puede cambiar de forma radical.
5. Lista de ingredientes
Muchos confunden la lista de ingredientes con la receta de un producto, pero no es así. La lista de ingredientes, como su nombre lo indica, contiene únicamente los ingredientes del producto; no las cantidades.
¡Presta atención! Si hay un producto que no puedes pronunciar o reconocer, no significa que sea químico tóxico; te recomendamos que lo busques en bases de datos confiables para que tu consumo sea seguro.
