En medio de todos los retos que ya existen para la industria alimentaria debido a los cambios originados por la pandemia, a finales de 2020 se presentó uno más con la escasez de materias primas para envases de plástico y de cartón. Ante este panorama, el sector alimentario necesita buscar otras estrategias para cumplir con la demanda del mercado.
En este artículo te contamos sobre el desabasto de estos materiales.
Escasez de materias primas del plástico
Una de las causas de este desabasto es el aumento de precios, por parte de los fabricantes de las materias primas, de los polímeros a nivel mundial. En Europa, se incrementó el precio en las resinas plásticas hasta casi un 50% durante el primer trimestre de este año, ocasionando retrasos en la producción y entrega de productos.
En España, por ejemplo, 30% de las empresas ya han experimentado un alza de hasta el 60% en sus precios, lo que está ocasionando una caída en su producción.
¿Por qué sucede esto?
A pesar de la recuperación económica durante el segundo semestre de 2020 (tras la caída provocada por el COVID-19) y el aumento de nueva cuenta en la producción de los transformadores de plásticos la oferta de la materia prima no aumentó.
La escasez de materias primas podría afectar el abastecimiento de productos considerados esenciales, especialmente en el contexto de la actual pandemia de COVID-19.
El caso de América
El continente americano también ha resentido la falta de materias primas para la Industria del Plástico. En marzo de 2021, el precio de las resinas en Norteamérica se disparó como resultado del incremento en la demanda y el alza experimentada desde enero.
En Estados Unidos, las resinas de poliestireno y polipropileno han sido las más afectadas cuyos precios se dispararon a 10 y 12 centavos de dólar por libra respectivamente.
El efecto COVID-19 y la gran demanda de China en el desabasto de plástico
Durante la pandemia la demanda en los insumos de plástico para el sector salud se incrementó con la necesidad constante de materiales para cubrebocas, envases de productos farmacéuticos, geles antibacteriales y artículos de limpieza en general, que son elaborados con resinas plásticas.
Desde el último cuatrimestre del año pasado, los efectos de la pandemia en China derivaron en el incremento en la demanda de resinas plásticas por parte de ese país. El gobierno chino adquirió mayores cantidades de resinas y a mejores precios que las industrias de plásticos de Europa, Norteamérica y América Latina. La mayoría de las cantidades de resina que se producen actualmente, por lo tanto, están siendo destinadas a esa nación.
Todos estos factores han dado como resultado un incremento en los precios de las resinas plásticas, materia clave para la producción de distintos productos de uso cotidiano y de la industria alimentaria que, de acuerdo con varios analistas, están en riesgo de aumentar su precio.
Desabasto de cartón
En México, los productores de alimentos que emplean el cartón en sus envases y embalajes también están sufriendo por el desabasto de este material, enfrentando problemas y retrasos de los empaques para sus productos; lo que temen es que sus proveedores ya no puedan surtirles de sus empaques.
El problema se ha desatado debido a la crisis de producción de rollos de papel kraft que enfrenta Norteamérica, la cual ha sido generada por el desabasto de papel reciclado y celulosa virgen en la región, lo que ha desatado fuertes alzas de este insumo y sus derivados como los empaques de cartón.
En México la mayor parte de la producción de papel kraft proviene de fibra reciclada, la cual China está acaparando el mercado.
La importancia del cartón para la industria
Los alimentos y bebidas contenidos en empaques de cartón quedan protegidos de forma óptima y conservan su alta calidad durante largo tiempo. Además, se hallan entre las soluciones de envasado más ecológicas que existen para alimentos de larga duración.
Con su alto contenido en madera, los empaques de cartón han demostrado tener una huella ecológica considerablemente menor que todas las demás alternativas de envases para productos de alimentación de larga duración.
No hay elemento en toda la cadena de valor que esté más ligado a un producto que el envase que lo contiene. Ante un escenario como el desabasto de los principales materiales para embalajes, las empresas de alimentos deben considerar dar el paso hacia la innovación en materiales para sus empaques que beneficien a la industria en cuanto a costos de producción y, al mismo tiempo, posicionarse como empresas socialmente responsables.